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Colusión implícita

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Cuando decidas disputar un torneo de NLHE, sea online o en vivo, la meta máxima será coronarte campeón y con ello, llevarte el jugoso premio reservado para los ganadores.

Para lograr el objetivo, deberás trazar una estrategia, que deberá ir variando según los rivales que debas enfrentar. La flexibilidad de tu plan de juego, será un factor mayor a la hora de la toma de decisiones.

Si en los primeros niveles de ciegas, se te ha asignado un asiento en una mesa llena de contendientes loose, lo natural es ajustar tus rangos y jugar un estilo tight. Por el contrario, si en la mesa “nadie mueve una ficha”, deberás ser tú quien emplee un estilo loose y tratar de aprovecharte de la inactividad de tus oponentes.

Cualquier observador, podrá percatarse que hemos utilizado varios sinónimos para referirnos a nuestros compañeros de mesa. Hay quienes se refieren a ellos como villanos, oponentes, rivales, contendientes o enemigos.

Sabido es que el poker es un juego de caballeros. Pero esos caballeros compiten, ya que estamos hablando de un deporte individualista.
Por tal motivo, cualquier situación que haga sospechar al dealer, director del torneo o la autoridad pertinente que no estamos “compitiendo” contra nuestros rivales y, mediante nuestras acciones, estamos dejando pasar oportunidades para apropiarnos de las fichas ajenas para no debilitar stacks “amigos”, será severamente sancionada.
Sin embargo, existe una única oportunidad donde circunstancialmente, podemos aliarnos momentáneamente con un rival, para perjudicar a otro; a esto se denomina colusión implícita.
La colusión implícita, si bien no es una práctica decorosa, no se encuentra dentro del listado de movidas prohibidas. Veamos un ejemplo: Supongamos que estamos en la burbuja, vale decir que cuando un participante sea eliminado, el resto de los jugadores entrarán en cobros.
Pedro, desde la el botón, hace un raise estándar de 3 ciegas. José, quien tan solo tiene 6 ciegas en su haber, decide ir all-in desde la ciega chica. Sergio, en la ciega grande, paga el all-in, volviendo la acción a Pedro quien también anuncia el call.
Cuál es la situación? Tenemos un jugador (José) quien está all-in y por ende su permanencia en el torneo pende de un hilo. Pedro y Sergio, han pagado ese all-in y jugarán por un pozo alternativo entre ellos o side pot.
Se abre el flop. Si Sergio sale apostando, 2 cosas podrán pasar:
1) Pedro sigue en la mano (pagando, o con un re-raise).
2) Pedro foldea.
Es a todas luces evidente, que a menos que alguno haya conectado fuerte el flop, la mejor estrategia es darse check hasta el showdown.
El objetivo? Tratar de eliminar al jugador all-in (José) y así poder entrar en cobros. El viejo lema que 4 cartas pueden más que dos, entra en juego.
La conducta es ética? Pensemos un poco. Dos jugadores que se alían para perjudicar a un tercer jugador. Seguramente no lo sea.
Ahora bien, esta jugada está permitida? La respuesta es sí.
Lo que acaban de atestiguar es un caso más de colusión implícita. Si tienes los escrúpulos, incorpórala a tu arsenal.

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